Subida a Ghisallo en bicicleta
La subida al Ghisallo en bicicleta, o mejor dicho, al puerto del Ghisallo, es una ruta que podríamos definir como «mística». Más que por su dificultad, que parece querer llevarnos a una dimensión desconocida, es por su importancia histórica y religiosa.
He recorrido esta ruta varias veces, y cada vez que llego a la meta noto un ligero escalofrío. Mide unos 9 km y tiene una pendiente media del 5,5%. El ciclista que tiene el record de ascenso es Paolo Bettini (19’30” en el Giro de Lombardía 2005).
1. Más información sobre el puerto de Ghisallo
Ghisallo es un puerto de montaña que se encuentra a 754 metros sobre el nivel del mar, justo en la parte meridional del Lago Como, entre las ciudades de Como, Lecco y Bellagio, en el norte de Italia. En la explanada del Ghisallo hay una pequeña iglesia: el santuario de la Madonna del Ghisallo (Virgen del Ghisallo). La leyenda cuenta que el nombre procede de un tal Ghisallo, quién, en la edad media, fue agredido por unos bandidos y prometió construir una iglesia si conseguía salvarse… Y parece que le fue bien.
El Ghisallo se puede ascender desde la vertiente sur, una ruta más larga y con menos pendiente, aunque con vistas menos bonitas, o desde la vertiente norte, con salida desde la localidad de Bellagio. Hoy vamos a hablar de esta ruta que, por tradición, forma parte del recorrido del Giro de Lombardía y que alguna vez hemos visto incluso en el Giro de Italia. Por este motivo, la Madonna del Ghisallo tiene muchos devotos entre los ciclistas, de quiénes fue nombrada patrona en 1949.
En la explanada del puerto, donde podemos disfrutar de unas magníficas vistas del Lago Como en el «ramo» de Lecco, se encuentran el Museo del Ciclismo y el monumento al ciclista.
2. Cómo llegar al inicio de la subida al Ghisallo
Tanto si vas en coche como en tren, la única opción es llegar hasta Como o Lecco, ambas situadas a unos 40 km de Milán, y desplazarse hasta Bellagio. Tú decides dónde empezar a calentar.
3. La subida al Ghisallo: salida
Al dejar la zona peatonal de Bellagio, en el desvío de la carretera nacional SS 583, si sigues las indicaciones para llegar al Museo del Ciclista y la Madonna del Ghisallo, es imposible equivocarse. Aquí la carretera sigue cuesta arriba. Los primeros 4 km son los más duros. La pendiente media es del 9%, aunque en algunos tramos llega hasta el 14%. El asfalto está bien y, aunque las vistas no son excepcionales (a diferencia de otras carreteras que bordean el lago), la ruta no es nada aburrida gracias a la presencia de numerosas curvas y a la casi total ausencia de rectas largas.
4. La subida al Ghisallo: la carretera se aplana
En Guello, la carretera se hace más llana y podemos tomar aliento. Durante 3 km, podemos aprovechar para reponer fuerzas y hasta come, ya que el terreno presenta incluso una ligera bajada. Si no tienes en cuenta el tiempo, puedes parar en la explanada de Civenna, junto al monumento en honor a los moteros caídos, y disfrutar de las vistas del lago.
5. La subida al Ghisallo: llegada
Nos esperan los últimos 1500 m de subida, con un desnivel medio del 8,5%. En las afueras de Civenna empiezan 6 curvas cerradas que nos permiten respirar a pleno pulmón a cada cambio de sentido hasta la recta final, el tramo más duro de toda la cuesta. Desde aquí ya es visible nuestra meta, el Santuario de la Madonna del Ghisallo, y podemos apretar y llegar a la cumbre rápidamente.
6. La subida al Ghisallo: el Santuario de la Madonna del Ghisallo y el Museo del Ciclismo
Al llegar a la meta, hay que seguir el ritual: visitar una parte de la pequeña iglesia que acoge muchas reliquias, regaladas por los atletas más importantes de la historia del ciclismo, una foto debajo del Monumento al ciclista y, si sobra tiempo, una visita al Museo del Ciclismo.
7. Muro de Sormano: ¿sí o no?
Cada vez que voy al Ghisallo, me surge una duda: para volver al coche, ¿paso por el Muro de Sormano?
Mejor me lo pienso con la cabeza fría.
«¿Una cerveza?»
«¡Sí, por favor!»
8. Recomendaciones
- Si puedes, aprovecha para hacer esta salida el día del Giro di Lombardía. La carretera está cerrada al tráfico y sentirás la emoción de pedalear junto con otros apasionados de ciclismo. Cuando llegues a la cumbre, disfruta viendo pasar los profesionales y… No te deprimas por su velocidad.
- Bici recomendada: de carretera.
Stefano Francescutti