Por qué es importante saber elegir el calzado deportivo
En anteriores artículos en este blog te hemos introducido en los nuevos modelos de zapatillas de running y trail, siempre con el interés de ayudarte a saber elegir entre el mejor modelo adaptado a ti, según prestaciones y precio.
En los años 70 prácticamente con los modelos contados con una mano, se practicaban infinidad de deportes. Sin embargo en la actualidad y gracias a la tecnología aplicada a los materiales y al estudio biomecánico en el deporte, se dispone de un más que numeroso abanico de posibilidades de calzado según el deporte a practicar.
Hemos pasado en 40 años del modelo polifuncional a la customización del calzado deportivo, no solo a nivel deportivo profesional sino a nivel aficionado. Y a entender la zapatilla deportiva como una forma de moda diaria en los pies.
Sin embargo tanta variedad en la oferta no debe alejarnos de la necesidad de saber elegir el calzado más idóneo para la práctica de nuestro deporte favorito.
La primera cuestión a plantearse: cuál es la práctica deportiva a realizar. Está claro que según sea el deporte puede o no tener cabida esta pregunta. No es lo mismo elegir una zapatilla para correr que una zapatilla para montar en bici o jugar al futbol sala. Pero hay modalidades deportivas que llegan abrumarnos por la cantidad de marcas y modelos disponibles. Sobre todo si hablamos de running.
La segunda cuestión es saber en que tipo de suelo vamos a practicar nuestro deporte. Desde hierba a parquet, pasando por arena o asfalto. Cada modalidad tiene su superficie y en algunos casos podremos practicar la misma en varios terrenos y esto nos debe hacer reflexionar sobre la elección adecuada. Por ejemplo si corres en ciudad y en naturaleza, debes elegir calzado según sea tu destino.
Tercera cuestión será la morfología de nuestro pie. La horma, la pisada, medidas, necesidad de plantillas van a determinar por completo la elección.
Aunque resulte obvio no queremos dejar de llamarte la atención sobre estas premisas a la hora de elegir tus zapatillas, sean para el deporte que sean:
-Las zapatillas buenas para tu vecino no tienen porque ser las mejores para ti.
-Las zapatillas deben ser siempre según el deporte que hagas en cada ocasión.
-El número no tiene porque ser el mismo según el modelo anterior.
-Los dedos deben moverse libremente y no tocar la puntera.
-Si puedes, no te pruebes el calzado con el pie en frío y sin el calcetín previsto para su uso.
-Está claro, la morfología es distinta entre hombre y mujer.
Tus pies al correr y saltar soportan hasta 6 veces tu peso. Las sesiones de entreno frecuentes pueden afectar tus pies, tobillos, rodillas, caderas y columna. Bien sabemos los corredores la relación que puede haber entre un dolor de espalda y un cambio de zapatillas.
Desde esguinces, luxaciones, tendinitis, sobrecargas hasta rozaduras, ampollas, quemaduras, callos pueden aparecer por la mala elección de tus zapatillas.
Las primeras zapatillas de la historia se comenzaron a fabricar a finales del siglo XVIII con los desechos de caucho de las ruedas. Sería en 1876 cuando una empresa inglesa fabricó las primeras zapatillas deportivas, la marca que mas tarde se convertiría en la conocida como Dunlop y lo hizo en su momento para jugar al croquet.
Hoy mas de 130 años después en Deporvillage podemos ofrecerte hasta 286 posibilidades de calzado de running, ciclismo y sportswear. Te ofrecemos asesoramiento, es una de nuestras vocaciones.